Llegar a los vecinos con actos de bondad era una cosa, pero los vecinos de la búsqueda para servir fue otro de los miembros de la Iglesia Saddleback John y Laura Cipres. Cuando el pastor Rick Warren de la mega-iglesia en Orange County, California, anunció hace unas semanas que todos los servicios de culto durante la segunda semana de diciembre se canceló para que la congregación pueda participar en las oportunidades de voluntariado en todo el sur de California, la pareja se enfrentó a un poco de un dilema.
Plan de Warren para movilizar a su base de 5.000 pequeños grupos de estudio, y por lo menos la mayoría de sus 20.000 miembros sonaba bien a los Cipreses, pero en realidad no tenía ninguna vecinos para ofrecer sus servicios a. Su casa se encuentra frente a un montón de aparcamiento de la escuela católica y junto a ellos viven los residentes de la escuela católica y su comunidad, todos ocupados con sus actividades de la iglesia propia.
Que la noche del domingo de la convocatoria, Laura Cipres se puso en línea y encontré una lista en la página web de Saddleback de las oportunidades de voluntariado organizado ya para el «Fin de Semana del Buen Vecino».
Con su esposo a su lado en el equipo, que aterrizó en la oportunidad de ir con otras personas de la iglesia para entregar los regalos de Navidad a los niños procedentes de hogares monoparentales en un barrio de Rosarito, al sur de Tijuana, México. El viaje a «una fiesta de Navidad» no era más que un coche al sur con menos de dos horas en camionetas de la iglesia.
La oportunidad de voluntariado fue un viaje de misión de un día y después de leer acerca de esta oportunidad de servir a los Cipreses supo de inmediato que iban a ser buenos vecinos en un país «al lado».
El sábado, la pareja fue parte de un grupo de 35 personas, la mayoría de Saddleback, quien ayudó a organizar una fiesta de Navidad para más de 200 niños en un barrio de Rosarito, cada uno recibe un regalo, comida, y un tiempo para simplemente divertirse.
El viaje fue conducido por varios miembros del equipo de paz mundial de Saddleback que se centra en el área de Baja California, México,. Dos de sus miembros, Isabel y Juan Monje, el plan para construir un centro para niños de guardería en el terreno baldío utilizado para la fiesta de Navidad.
Fin de semana del Buen Vecino fue la visión de Saddleback Pastor Rick Warren, quien pidió a los miembros de su congregación a tomar por lo menos medio día el sábado o el domingo (10 de diciembre, 11) para ir a «servir a la comunidad y amar a tu prójimo como a ti mismo. »
Ciprés y su marido le dijo a The Christian Post que estaban en la misma página con Warren para el evento de fin de semana de la iglesia desde el principio.
John Cipres explicó: «Hemos estado orando y pidiendo a nosotros mismos» ¿qué estamos aquí? «Al igual que el pastor Rick dice:» ¿Cuál es nuestro propósito? »
«El fin de semana de buen vecino era en realidad un vehículo para que nos mueve», dijo Laura Cipres. La pareja, que están en sus 50s y han estado casados por 10 años, dijo que había perdido un negocio de su propiedad hace unos años. Después de venir a Saddleback, su fe en Dios fue revitalizado y que estaban dispuestos a salir de su zona de confort. No había estado en ningún tipo de alcances que eran similares a la que se embarcaron el sábado.
Cuando se le preguntó acerca de tener que faltar un servicio de la Iglesia Saddleback (la iglesia que normalmente ofrece dos servicios los sábados y tres los domingos), Laura Cipres dijo: «El pueblo es la iglesia, así que no importa a dónde vamos, que es la iglesia. Estamos haciendo la iglesia.
«Para mí, servir a los demás es lo que Dios quiere de nosotros. Esa es la iglesia. ¿Qué mejor manera de servirle y honrarle, que cuando usted puede ser su mano extendida? Sí, me puedo sentar en la banca y deje que se caliente y ser bendecidos, pero fui bendecido por lo que ayer que no puedo dejar de pensar en ello «, dijo.
Durante el evento, los miembros de la misión del equipo se les dio la oportunidad de dirigir un grupo de niños, de cinco a una docena de actividades en el área designada. Pintura de la cara, jugando en las casas de saltar, y más tarde, abrir los regalos fueron parte del día.
John Cipres dijo que uno de los niños a los que fue comparado con un niño de 4 años de edad. En un momento dado, el muchacho tomó la mano de Juan y comenzó a acariciar suavemente su cara con él.
La pareja estaba realmente conmovido por la acción, dando cuenta de que el niño puede no tener ningún padre o la atención en el hogar paterno.
«Lo que me tomó de este fin de semana es que se me hizo más consciente de otras personas y sus necesidades», dijo Laura. «Cuando me paro a ver eso, entonces yo no estoy mirando las cosas triviales que están pasando en mi propia vida. Todo lo demás parece pequeño para mí ahora. »
La Iglesia de Saddleback está reuniendo informes y la información sobre todos los fin de semana de buena vecindad que sirven los acontecimientos y espera que para compilar una estimación de las horas-hombre entregado en el nombre de Jesús.
Evento principal coordinador de Pastor Rees Erik pidió la semana pasada por la CP acerca de lo que su esperanza es para fin de semana del Buen Vecino. Él dijo: «Para mostrar el amor de Dios a nuestros vecinos del otro lado de la calle, en el camino, y en la comunidad a través de simples actos de compasión y bondad.»
A juzgar por las sonrisas de los niños y sus madres en Rosarito, misión cumplida.
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